Observo el cielo,
acodada en la baranda
de la náutica atalaya:
se avecina la tormenta,
el sol, atemorizado,
busca refugio seguro,
en las nubes halla amparo
y de grisáceos pigmentos
se va tintando el ocaso.
El mar está harto crispado,
deletéreo tema canta,
no tararea, no interpreta
melodías para el alma.
Haciendo trizas el traje
que vestía de mañana
ya no se adorna con dijes
de diamantes y esmeraldas,
ahora luce, circunspecto,
agresivo ópalo negro.
Regurgitando sargazo
esboza una diagonal
y taimado caracolea
hasta invadir la calzada,
y sobre el viandante itera
cristales de lluvia amarga.
© María José Rubiera
acodada en la baranda
de la náutica atalaya:
se avecina la tormenta,
el sol, atemorizado,
busca refugio seguro,
en las nubes halla amparo
y de grisáceos pigmentos
se va tintando el ocaso.
El mar está harto crispado,
deletéreo tema canta,
no tararea, no interpreta
melodías para el alma.
Haciendo trizas el traje
que vestía de mañana
ya no se adorna con dijes
de diamantes y esmeraldas,
ahora luce, circunspecto,
agresivo ópalo negro.
Regurgitando sargazo
esboza una diagonal
y taimado caracolea
hasta invadir la calzada,
y sobre el viandante itera
cristales de lluvia amarga.
© María José Rubiera
7 comentarios:
MI QUERIDA AMIGA ,PRECIOSOS VERSOS AL CIELO ...BESITOSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSMARINA
Amiga Maria Jose; bonitos versos a la trayectoria solar.
Besos
Hola María José, que poema en honor al cielo mas hermoso, y es que, él da para tanto,es infinito e infinito su verso, así como el tuyo.Que pases un buen día amiga.Un gran abrazo.
La contaminación atmosferica nos inunda y no nos damos cuenta, pero ahí está...peremne encima de nosotros...un besote preciosa.
Has bordado el cielo con tus letras
Un abrazo
Un bello poema, cielo y mar, un conjunto de melodías que abrazan.
Un abrazo
Hermoso poema, una delicia leerlo una y otra vez, hermoso canto al cielo que diariamente nos cubre.
Un beso.
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