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lunes, 28 de febrero de 2011

Si supieras...

Amado amor, si supieras
cuánto me apena tu pena,
debida a esa dualidad
que en tu alma reside, que te enajena.

© María José Rubiera

4 comentarios:

Gabriel Cordears dijo...

"Amado amor...
me apena tu pena..."
Amar es estar en el otro, en su corazón.

Un beso

María José Rubiera Álvarez dijo...

Así es, Gabriel, en su corazón... y en su alma.
Gracias por la visita y los comentarios, amigo. Besos.

Nortiz dijo...

Jaja, cinco entradas seguidas con el alma. Qué curioso. Sí que hace tiempo que no me paso por aquí entre unas cosas y otras... qué mal.
Tan bello como cierto cuando el amor es verdadero, cuando procede del alma :) Lo sé, es verdad.
Un beso

Carmela dijo...

Breve y profundo.
Cuando amamos con intensidad nos duele el dolor del otro.
Sentimos la pena del ser querido como si fuese propia e intentamos mitigarla.
En éso reside el verdadero amor.
Me gustó mucho.
Besos.